El reciente anuncio de un alza promedio del 7,1% en las tarifas eléctricas a partir de julio de 2025 afecta directamente a millones de hogares y empresas en Chile. Algunas regiones experimentarán aumentos de hasta un 7,76%.
Estas alzas se suman a las ya aplicadas en 2024, cuando comenzó el descongelamiento de tarifas acumuladas por más de 4 años. En ese período, los aumentos llegaron al 57% en algunos tramos, afectando de manera significativa a pequeñas y medianas empresas, así como a consumidores residenciales. Esta tendencia al alza no es transitoria: refleja una presión estructural sobre el sistema eléctrico nacional.
En este contexto, la energía solar aparece como una solución concreta, accesible y sostenible. Hoy existen tecnologías maduras que permiten generar electricidad directamente desde los comercios e industrias, reduciendo la dependencia del sistema centralizado y mitigando los efectos de estas alzas.
La autogeneración fotovoltaica no solo disminuye las cuentas mensuales, sino que también entrega autonomía energética y estabilidad de largo plazo a quienes la adopten.
La transición hacia un modelo energético descentralizado y renovable es urgente. La energía solar no es una promesa futura: es una herramienta disponible hoy para enfrentar las desigualdades del sistema eléctrico y avanzar hacia un país más justo y sustentable.
Martín Benegas – Head Business Developer de Terralink
